domingo, 19 de julio de 2009

CHESPIRITO SIN COMERCIALES


Ni el pobre Chavo del ocho se salvó.
Esta tarde de Domingo, que además de suponerse familiar, se encuentra en medio de las vacaciones de invierno de los niños de Chile, he intentado seguir un capítulo más de este clásico del humor. Como si en la estación televisiva Mega, supieran que el tipo de humor de esta serie no está completamente dedicado al público infantil, sólo alcancé a ver pocos minutos cuando de pronto comenzó la pausa comercial clásica de nuestra televisión.
El problema es que esta pausa se hizo eterna. Pude hacer diferentes cosas en mi casa antes de que volviera a aparecer en pantalla la vecindad. Para ese momento yo ya tenía preparado mi cronómetro, el cual registró 4 minutos con 11 segundos de Chavo para inmediatamente dar paso a los comerciales. Apenas logré entender de que se trataba el episodio que estaba viendo.
Ahí aparecieron los siguientes productos:

Cola Cao
My little Pony
Nenuco (con dos spots seguidos)
Transformers (juego)
Nerf
Packard bell dot *
Majorette (dos spots seguidos)
Starwars (juego)
Omo*
Play doh
Pulgas locas
Palabras arriba
Clue
Axe*
Hot wheels
Elefun
Baby alive (dos spots seguidos)
Fur Real
Lady speed stick*
Transformers (juego)
Nerf
Spider man (juego)
Nerf
Claro* (promoción Era del hielo III)
Little Pet shop VIP
Twister jump
Colgate total*
Play doh
Adivina quien
Twister

Casi todos los juegos, salvo los autitos Majorette son de Hasbro, marca que debe haber pagado muchos millones por ese paquete publicitario.
Los productos que están acompañados del asterisco son los únicos que están dirigidos al público adulto.
Esta interminable lista de spots comerciales estuvo al aire durante exactamente 11 minutos. Once eternos minutos que cronometré esperando que volvieran los personajes de la vecindad del Chavo.
No es esto lo que yo esperaba ver en televisión cuando paseaba por los canales nacionales y me detuve en Mega para ver la genialidad de Chespirito.
Ahora estoy pensando que no sólo los productos promocionados que tienen asterisco en este catastro están orientados al televidente adulto. En el fondo si hay niños viendo la televisión, sólo apuntarán con el dedo lo que quieren tener o con qué quieren jugar. Entonces, los padres, el papá que usa Axe, o la mamá que lava con Omo, son quienes compran los juguetes y, además, los únicos que se ríen con las aventuras del Chavo. Como yo.
Pero es muy desesperante tener que estar durante once minutos viendo comerciales, para luego tener que ver durante algo más de tres minutos, la última parte del programa mexicano. Y sería todo.
Mientras escribo esto, ya llevo más de siete minutos oyendo la tanda comercial del mismo canal. La diferencia es que ahora no estoy poniendo atención pues no conozco lo que están transmitiendo y por ende no me interesa.
La programación del Domingo en Mega son los avisos comerciales y de pronto, cada once minutos, hacen una pausa programática y emiten algo interesante, como el Chavo del ocho, por ejemplo. Si tú no lo encuentras interesante, es porque no viste los comerciales. Por lo demás, llevo treinta dos años encontrando interesante a Chespirito en todos sus personajes.
Agradezco a mis papás haberme llevado a la entrada del Hotel O’Higgins, hace esa misma cantidad de años, cuando todo el elenco vino a Chile, y permitirme estrechar la mano de uno de los pocos mexicanos que admiro.
Después de este recuerdo, vale la pena esperar once minutos de comerciales ridículos para verlo, por eso lo hice.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Q torturaaaaaa 11 min de comerciales-- pffffff...

Anónimo dijo...

Eres buen okservador jajaja...puedes trabajar en continuidad de peliculas...preciso.
anónima·