En mantención

Usualmente todos tenemos una frase incrustada en nuestras cabezas y que repetimos cada cierto tiempo: "... así somos los chilenos...". El chileno del alambrito que arregla todo. El chileno que escupe sus manos y las frota antes de hacer alguna maniobra que requiera algun esfuerzo. El chileno que pone la tapa de bebida bajo una pata de la mesa para que ésta no cojee. El chileno que ve la teleserie pero nunca reconoce ese hecho (salvo las mujeres).

Podría escribirse mucho al respecto, de lo bueno y de lo malo, pero existe en nuestra ciudad bella, Viña del Mar, una muestra de algo que sólo podemos hacer los chilenos.

Sólo en Chile se puede esperar la temporada estival, es decir, el verano, la mejor época del año para esta ciudad, para hacerle una mantención al reloj de flores.

Fue en Enero de este 2008. ¿Se imaginan que uno fuera a Paris en su pleno verano, y al momento de fotografiar la torre Eiffel, ésta estuviera cubierta de mallas porque está siendo reparada? Es cierto que es probable, pues en algun momento hay que hacer ese trabajo sucio, pero el Reloj de Flores no está en Paris, y acá en Chile, en Viña del Mar, está máquina recubierta de bolsitas con flores tiene su mayor cantidad de visitas sólo en verano. Pues bien, justo en verano, en enero, se le hace mantención. Ahora, esto no sería tan terrible si yo no me hubiera enterado de ello a traves de un lienzo demasiado rasca colgado de igual forma en un costado del pasto. Me atrevo a decir que un lienzo de la Garra Blanca o de Los de Abajo esta mejor confeccionado y se ve más decente.

No sólo el reloj está detenido en pleno verano, si no que además la presentación de las excusas es nada más y nada menos, típicamente nuestra, chilena. ¿Así es como hacemos las cosas? No todos, pero que podemos hacer si estamos en Chile.

Esperaré que vuelva a estar en mantención para tomarme una foto ahí. Nunca me he dado ese gusto. Sólo espero que el lienzo salga a mis espaldas. Chileno como el reloj de flores, chileno como yo.