INCENDIO CULTURAL

Otra vez se incendió un sector del recinto de la ex cárcel de Valparaíso. Este Centro Cultural y ha tenido siete focos de fuego únicamente en los últimos dos años.
Debo reconocer que poco me interesa el concepto de cultura que manejan acá en el puerto. Muchos morrales, clacetas grandes de lana y rayadas, piercings y aros raros, pelos de colores, tetas pintadas, festival de tambores (antiguas batucadas hoy reducidas), desfiles a pata pelada por el centro, mujeres con poleras desteñidas y sin sostén, grandes lienzos, máscaras, folletos, tocatas alternativas, FOSIS, FONDART, obras de teatro, caras blancas, cuerpos negros, movimientos robóticos, malabaristas, narices de toni (que ellos llaman payaso), zapatos grandes, monociclos, poleras sin mangas, en fin.
No creo que esa sea la única forma de manifestarse culturalmente y menos en Valparaíso, sin embargo, jamás se me pasaría por la mente atentar con fuego o de cualquier otra forma en contra de un recinto en el que se gestan todas estas celebraciones.
A pesar de que en televisión, en las noticias, se especula con que estos incendios "podrían" ser intencionales, a mi no me queda duda alguna que es así.
Por qué no dejan tranquilo el lugar.
La respuesta es muy simple. Sólo hay que imaginarse en cuánto podría estar avaluado ese terreno donde está la ex cárcel, cuántos metros cuadrados son, cuántos edificios de departamentos podrían construirse ahí.
Es obvio que hay más de una empresa que está viendo un negocio de proporciones ahí y que se sienta en los malabaristas y cuerpos pintados que habitan esporádicamente el lugar. No les importan las tocatas ni las obras de teatro.
A mi no me atrae ese estilo, pero no lo voy a destruir y menos habiendo nacido en este puerto y viviendo en él. Ojalá no lleguen a demoler este Centro Cultural en beneficio de unos privados que sólo van a seguir estropeando la inmejorable vista al mar de los porteños.